Bajo mi punto de vista, los mensajes que emiten los medios de comunicación están contaminados, por lo que la educación que se les presupone está muy condicionada. Es decir, cuando digo que están contaminados me refiero a los intereses empresariales que persiguen todos los medios (ya sea tele, periódico o radio): el beneficio económico.
Es difícil ver un medio que no se guíe por este tipo de fines. El objetivo general que se persigue en la gran mayoría de empresas informativas es el beneficio; para ello, hay que tener muy en cuenta el producto final, es decir, a quién va dirigido el mensaje. Este producto final se genera gracias al impacto. El medio hará todo lo posible por generar audiencia, difusión y que el público se enganche a su contenido, con la única intención de sobrevivir: beneficio económico.
En este aspecto, por desgracia, el contenido suelen dejarlo en un segundo plano y la educomunicación no la tienen muy en cuenta. De hecho, uno de los objetivos que persigue la comunicación a través de los medios es educar en la recepción crítica,de manera que el ciudadano sea consciente de cómo se construyen los mensajes que recibe para tomar decisiones más razonadas. Claro, esto es la teoría.
La práctica podemos verla en un ejemplo (uno cualquiera, por supuesto) tomado del canal 9 de la televisión de Argentina. Hace un tratamiento un tanto peculiar sobre el terremoto de Chile. Juzgar vosotros mismos:
El vídeo habla por sí mismo. Aunque es cierto que esto no quiere decir que todos los medios y que todos los programas hagan lo mismo.
Quiero poner otro ejemplo. Puesto que este blog quiere versar de fútbol, un buen "espejo" en el que mirarse es el espacio de deportes de noticias Cuatro: sensacionalismo en estado puro. Ejemplos de lo que hacen hay muchos.
Pese a ello, el objetivo debe ser otro y la educación a través de los medios es posible, ya que tienen una enorme influencia en el público, sobre todo, por la alta tasa de consumo que hacemos, mayormente, de la televisión, lo que pone de manifiesto la importancia de la comunicación visual. Programas como Informe Semanal estarían en el otro extremo de la balanza. Pero claro, los índices de audiencia que tiene no son elevados. Entonces, ¿será posible algún día que primen los espacios educativos en los medios por encima de los intereses económicos?
Desde mi punto de vista, eso será posible cuando los medios no requieran los costes habituales para sobrevivir. Cuando los medios se independicen de la publicidad, y esto es algo que las nuevas tecnologías están consiguiendo por su menor coste de mantenimiento, entonces podremos empezar a pedir programas que no tengan audiencias mayoritarias y que sin embargo cooperen con otros objetivos sociales.
ResponderEliminarMe tacharán de neoliberal y funcionalista, como suele pasarme (empiezo a plantearme que quizá siempre lo he sido, sin ser consciente), pero no se pueden pedir peras al olmo: ni las empresas ni los medios están aquí para limpiar nuestro planeta y convertirnos en masa crítica. Están para lo que están.
Si ni siquiera las instituciones públicas llamadas "sistema educativo" nos educan, ¿a cuento de qué vamos a pedir explicaciones a la televisión?